¿Confías en Mauricio Funes?
El Salvador necesita no solo un presidente con preparación académica, capacidad emocional y madurez. El país también necesita un mandatario de principios morales y cristianos.
¿Puedes decir eso de Mauricio Funes? ¿Sabías que los 7 pecados capitales son parte de su vida?
Los salvadoreños deben conocer los principios del candidato del FMLN.
Lujuria – Mauricio Funes ha estado casado tres veces y tiene una amante actualmente. Es un mujeriego.
Gula – El ahora político siempre ha gustado darse gustos innecesarios, aunque no pueda pagarlos. Por eso no le importa comprarse relojes Rolex o su carro de $22,000 Austin Martin Mini Cooper. Funes nunca satisface su consumismo.
Avaricia – No resistió la idea de ser candidato a la presidencia al solo imaginar todo el poder y el dinero que podría tomar al ser mandatario.
Pereza – En su vida, toda carrera universitaria que cursó la abandonó. Al final, de tres no se graduó de ninguna.
Ira – De todos es conocida la prepotencia de Funes cada vez que lo cuestionan o si no le gusta cómo se dirigen a él.
Envidia – En realidad, el ex entrevistador envidia tener una vida normal, una familia normal. Quisiera llegar a su casa y tener una esposa cariñosa, sentirse orgulloso de sus hijos. Pero no tiene nada de eso.
Soberbia – Ante las cámaras, Mauricio Funes muestra toda su soberbia. Ya se olvidó de que antes era periodista y ahora en cualquier oportunidad trata de desvirtuar a sus ex colegas.
Este es el verdadero Mauricio Funes.
¿Confiarías en él?
El Salvador necesita no solo un presidente con preparación académica, capacidad emocional y madurez. El país también necesita un mandatario de principios morales y cristianos.
¿Puedes decir eso de Mauricio Funes? ¿Sabías que los 7 pecados capitales son parte de su vida?
Los salvadoreños deben conocer los principios del candidato del FMLN.
Lujuria – Mauricio Funes ha estado casado tres veces y tiene una amante actualmente. Es un mujeriego.
Gula – El ahora político siempre ha gustado darse gustos innecesarios, aunque no pueda pagarlos. Por eso no le importa comprarse relojes Rolex o su carro de $22,000 Austin Martin Mini Cooper. Funes nunca satisface su consumismo.
Avaricia – No resistió la idea de ser candidato a la presidencia al solo imaginar todo el poder y el dinero que podría tomar al ser mandatario.
Pereza – En su vida, toda carrera universitaria que cursó la abandonó. Al final, de tres no se graduó de ninguna.
Ira – De todos es conocida la prepotencia de Funes cada vez que lo cuestionan o si no le gusta cómo se dirigen a él.
Envidia – En realidad, el ex entrevistador envidia tener una vida normal, una familia normal. Quisiera llegar a su casa y tener una esposa cariñosa, sentirse orgulloso de sus hijos. Pero no tiene nada de eso.
Soberbia – Ante las cámaras, Mauricio Funes muestra toda su soberbia. Ya se olvidó de que antes era periodista y ahora en cualquier oportunidad trata de desvirtuar a sus ex colegas.
Este es el verdadero Mauricio Funes.
¿Confiarías en él?
